«El proceso de desarrollo económico es una secuencia infinita de decisiones [basadas en valores] que favorecen la inversión, la competencia y la innovación.»
Mariano Grondona, politólogo y sociólogo argentino.
Los valores son otro concepto, al igual que la cultura, que tiene decenas de significados e interpretaciones. El sociólogo estadounidense Talcott Parsons (1959) definió un valor como «el elemento dentro de un sistema compartido que sirve como criterio para decidir entre varias alternativas en una situación dada.» En otras palabras, en los «momentos de verdad», respondemos y actuamos según los valores que sostengamos como más fuertes.
Desde jóvenes, los seres humanos progresamos de tomar decisiones aleatorias, a tomar decisiones basadas en creencias. Pasamos de escoger aleatoriamente entre A o B, a la construcción de un sistema de creencias que nos ayudan a escoger entre A o B. Este progreso lo llevamos a cabo tomando en cuenta nuestra experiencia, la cual está influenciada por nuestros estados de ánimo, por ideales, normas, y el conocimiento establecido de la cultura que nos rodea.1
De esta cuenta, definimos los valores como los criterios aprendidos que nos predisponen a comportarnos como lo hacemos. Los valores surgen de nuestros sistemas de creencias, tanto afectivas (las creencias que tenemos en base a nuestros sentimientos) como cognitivas (las creencias que tenemos en base a conocimiento). Las actitudes no son más que la las manifestaciones de estos valores fundamentales.
Existen dos tipos de valores: los valores intrínsecos y los valores instrumentales.
Los valores intrínsecos son aquellos que sostenemos sin importar los beneficios o costos que ello implique. Por ejemplo: el patriotismo como un valor, demanda sacrificios y a veces es perjudicial a nuestro bienestar (millones de personas han muerto al defender a su país y sostener el valor del patriotismo).
Los valores instrumentales son aquellos que sostenemos porque tienen un beneficio directo hacia nosotros, son valores temporales. Cuando algo tiene un valor instrumental, significa que sólo es visto como un medio para lograr otro fin que es, a su vez, lo más importante y el fin último.
Los valores caen dentro del ámbito de la cultura a la cual llamamos «ética». El comportamiento de una persona basado en sus valores intrínsecos, los cuales acepta, incorpora en su ser y los convierte en una imperativa interna, se llama «moral«. Una persona es moral cuando responde a sus valores intrínsecos.
El politólogo y sociólogo Mariano Grondona2, sostiene que «el proceso de desarrollo económico es una secuencia infinita de decisiones que favorecen la inversión, la competencia y la innovación». En momentos de prosperidad nacional, un país puede verse tentado a tomar decisiones basadas en valores instrumentales y no en valores intrínsecos.
Cuando una nación es rica, debe tener en su sistema de valores algo más que la búsqueda de riqueza, de tal forma que al alcanzar la riqueza (el dinero siendo el valor instrumental) no detenga el desarrollo, pues el desarrollo se basa en el valor intrínseco (seguridad, bienestar, felicidad, libertad).
Los valores que una nación acepta o ignora caen en el ámbito cultural. Por ende, el proceso de desarrollo económico es un proceso cultural.
1. Value Theory. The British Journal of Sociology, Vol. 23 (June 1972) 172-187.
2. Lawrence E. Harrison, Samuel P. Huntington. Culture Matters: how values shape human progress. (2000). Chapter 4: A cultural typology of Economic Development by Mariano Grondona, p. 44-47
Muy buen aporte. Gracias por compartirlo.